La última tendencia en biohacking viene con una implicación de ciencia ficción: en colaboración con la Feria Cyborg de Dusseldorf, los biohackers de Wetware de grindhouse desarrolló un implante LED llamado Northstar V1 que se puede activar magnéticamente.
El implante, que está hecho de silicona de grado quirúrgico, tiene aproximadamente el tamaño de un dólar de plata y se asemeja a una miniatura del Arc Reactor de Tony Stark. "La gente en la escena del biohacking lo quería así", dijo el equipo en una entrevista. Placa madre. “Nos contactaron porque querían tatuajes brillantes. Entonces la comunidad nos inspiró a desarrollar estos implantes”. Una vez colocado, el implante se puede activar con un imán externo que ilumina cinco LED durante 10 segundos. Una vez transcurrido el tiempo, el dispositivo volverá al modo de suspensión hasta que el usuario lo despierte nuevamente.
Grindhouse Wetware se formó en 2012 a partir de un autoproclamado "grupo heterogéneo de programadores, ingenieros y entusiastas" inspirado en foros de biohack.me. Hoy en día, el objetivo de Grindhouse es diseñar y fabricar dispositivos que se puedan fabricar fácilmente con instrucciones, utilizando tecnología de código abierto segura y asequible. La pregunta que surge aquí es, por supuesto, si algo como esto es, en última instancia, inofensivo para la salud. Para ello, debes asegurarte de que el Northstar V1 fue fabricado de manera limpia y estéril y, además, no debes tener la idea de querer insertar el implante tú mismo, sino que solo lo hagan especialistas capacitados. Como ocurre con todos los implantes subcutáneos en la modificación corporal convencional, siempre existe el riesgo de infección o de que el cuerpo rechace el implante.
También está la cuestión de la duración de la batería. El implante puede iluminarse unas 100 veces con una batería. Este luego deberá ser eliminado o reemplazado, circunstancia porque el equipo espera poder cambiarlo con la versión dos. Northstar 000 también debería poder controlar varios colores y, si el fundador de Grindhouse, Tim Kanone, se sale con la suya, poder sincronizarse con una aplicación de teléfono inteligente. Cannon: “Imagínate que sólo tienes que mover la mano y el implante reconoce el movimiento y envía los datos al smartphone. Allí ya se ha guardado el comando para este movimiento, como por ejemplo abrir la puerta del coche. Entonces el smartphone se comunica con el coche y la puerta se abre”. El equipo también planea integrar un lector de datos biométricos en sus dispositivos futuros, similar a los integrados en un FitBit o un reloj Apple. "Queremos hacer realidad la ciencia ficción", explica Kanone. Puede encontrar más imágenes, incluido cómo se inserta el implante, en Placa madre o mira el video a continuación. Bueno amigos, ¿les gustaría un implante Northstar debajo de su piel?